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El estilo de la nueva burguesía alemana de la primera mitad del siglo XIX
Tras la derrota del ejército francés en 1815, por los ejércitos británico y de Prusia, terminó la guerra entre Francia y los Estados aliados europeos. Durante 20 años no hubo guerra en Europa, por lo que fue el periodo de paz más largo que nadie recordaba. Se inició entonces, en los Estados alemanes, un periodo que posteriormente se denominaría Biedermeier. Denominación de la unión de dos palabras: “bieder”, que significa, fiel, probo, honrado, íntegro,… y “ Meier”, un apellido muy común en los Estados alemanes de la época. En 1855 se publicó un diario en Munich en el que se ridiculizaba a la burguesía conservadora en la figura de un personaje: el maestro de escuela Gottlieb Biedermeier. Ese nombre, derivado de una caricatura, se utilzó a partir de entonces para denominar al estilo artístico del periodo comprendido entre 1814 – 1815 y 1848, periodo que conocemos como de la Restauración. Fue un estilo que encontramos en las artes decorativas: muebles y otros objetos como los relojes. Los muebles poseían una elegancia más clásica y sencilla que la del anterior estilo Imperio francés. Se utilizaban menos molduras metálicas. En la mayor parte de los muebles fabricados en Austria y los Estados alemanes del sur se utilizaban maderas de árboles frutales de colores suaves. En los del norte se prefería la caoba oscura. El estilo Biedermeier también se desarrolló en Escandinavia, Rusia y Europa oriental.
La época Biedermeier es la del auge de la burguesía alemana. Hagen Schulze escribe en su libro Breve historia de Alemania (Alianza editorial, 2001):
[…] “El alemán medio ascendió a la categoría de símbolo de todo lo alemán: vestido con los ropajes más diversos, un individuo adormecido, cándido y agradable, se nos presenta en las pinturas románticas, fabulosas o amablemente estrafalarias de Moritz von Schwind o Ludwig Richter”. […]
La palabra Biedermeier evoca el fin de una época. En 1819 los ministros de los Estados alemanes acordaron sofocar con dureza cualquier movimiento revolucionario o liberal. Las posibilidades de desarrollar procesos constitucionales en ellos se redujeron. Austria y Prusia volvieron al absolutismo. Los movimientos nacionalistas y liberales volvieron a ser clandestinos. Todo parecía seguro para contener la revolución. Sin embargo, el diplomático austríaco Metternich sabía que no había vuelta atrás: “Mi pensamiento más secreto – escribió en su diario – es que la vieja Europa está al principio del fin”.
Reloj alemán de estilo Biedermeier
El siguiente reloj es originario de la Selva Negra. Dispone del tradicional mecanismo de platinas de madera con ejes y ruedas dentadas de acero y latón. La caja responde a la concepción artística del estilo Biedermeier.
Es un reloj de pared, a pesas, con un autonomía de marcha de 5 días y una caja en buen estado de conservación.
Al desmontar el reloj se pueden apreciar todos los detalles de las piezas. Estado en que se encuentran, grado de suciedad, de desgaste …
Desde la aparición del reloj mecánico en la Selva Negra, la madera, utilizada originalmente para hacer la mayoría de las piezas, fue gradualmente siendo sustituida por el metal: latón y acero, principalmente. Tanto es así, que basta con echar un vistazo a los relojes de esta región alemana, para hacerse una idea aproximada de la época a la que corresponden.
A la izquierda vemos la rueda de escape del reloj. Rueda, que junto con el escape y el regulador – el péndulo – hace que el mecanismo del reloj funcione a la frecuencia debida, para que pueda medir el tiempo.
La estructura del mecanismo es de madera de haya. La veta característica de la madera de este árbol así lo muestra. En dicha estructura, y en las dos platinas traseras, observamos los orificios practicados para la inserción de buchones. Los elementos del rodaje del mecanismo (del movimiento y la sonería) giran sobre estos pequeños casquillos metálicos.
La disposición del rodaje del movimiento y la sonería en los mecanismos de la Selva Negra no fue la misma en todas la épocas. En este caso, los rodajes – sonería y movimiento – están uno al lado del otro. Hasta bien entrado el siglo XIX, lo habitual era que los trenes de engranajes estuvieran uno detrás del otro. Normalmente el tren del movimiento en la parte delantera, y el de la sonería en la trasera. Esto hacía que los mecanismos tuvieran mayor profundidad que anchura, lo cual condicionaba el diseño de la caja del reloj. Seguramente para conseguir que las cajas de los relojes no sobresalieran tanto de la pared, se empezaron a construir mecanismos con los rodajes uno al lado del otro.
Podemos observar un detalle sobre la disposición del mecanismo dentro de la caja del reloj: No está fijado a la pared interna de la caja, como suele ser habitual, sino posado sobre dos piezas de madera dispuestas en el interior de la caja. Todo el peso del mecanismo, más el correspondiente a ambas pesas, se ejerce sobre los soportes de madera que vemos en la imagen. El mecanismo tiene también 2 aldabillas a los lados de su parte delantera, para sujetarlo a la cara interna de la caja.
Tres imágenes del mecanismo
La fuerza motriz del movimiento, al tener una autonomía de marcha de 5 días, debe ser mayor que las de relojes similares de 1 día cuerda. Por este motivo, el mecanismo (movimiento), requiere una pesa mayor que las correspondientes a los relojes de 1 día cuerda. Y esa pesa mayor, aconseja disponer el mecanismo posado, tal como vemos en las fotografías.
A la derecha podemos observar el orificio existente en la platina delantera del mecanismo. Esto permite ver como interaccionan el áncora y la rueda de escape. Esta comprobación es importante para determinar si puede funcionar correctamente.
Cuando el áncora está demasiado próximo a la rueda e escape, se producen interferencias en sus movimientos, y se bloquean. Cuando están demasiado separados, la energía transmitida por la rueda de escape al péndulo se reduce, disminuyendo la amplitud de su oscilación. Un buen ajuste de la distancia entre el áncora y la rueda de escape es importante para conseguir que el reloj funcione correctamente.