Muñeco autómata

El mundo de los autómatas es tan fascinante como el de los relojes. La fantasía y la magia, junto a ingeniosos mecanismos, hacen realidad lo que parece imposible: Que una figura inanimada se mueva por si sola  y parezca tener vida. Algunos de más célebres constructores de autómatas, fueron a la vez grandes relojeros. Juanelo Turriano (1500(?) – 1585), Pierre Jaquet-Droz (1721 – 1790), Jacques de Vaucanson (1709 – 1782) y tantos  otros, asombraron al mundo con sus autómatas.

El autómata que nos ocupa consiste en la figura de un muchacho, que al darle cuerda, tiene un divertido movimiento de bamboleo, a la vez que gira ligeramente la cabeza. Es descendiente de la mejor tradición de los autómatas mecánicos del Renacimiento. La simpática expresión del muñeco, y la forma de bambolearse, provocan nuestra sonrisa.

Descripción del mecanismo

En el interior de la figura del muchacho hay un ingenioso mecanismo que lo dota de movimiento. La energía se obtiene mediante un muelle real similar a los que encontramos en los relojes. El rodaje consiste en un primer elemento en el que tenemos el muelle real dentro de un barrilete, un segundo formado por un eje con una rueda dentada y piñón, y un tercero consistente en un engranaje helicoidal unido a un regulador de velocidad. La función del regulador – al igual que en los mecanismos de sonería de los relojes – es estabilizar la velocidad angular de los ejes del tren de engranajes.

En el segundo elemento del rodaje, el eje sobresale por la platina trasera del mecanismo. El movimiento de rotación de ese eje es el que se utiliza para dotar de movimiento al autómata. Uno de ellos es el de la cabeza, que tiene un movimiento de pequeña amplitud. La lentitud del movimiento produce una sensación de realismo en la figura que parece cobrar vida.

El otro movimiento del autómata es el de las piernas. Para ello se utiliza el mismo eje de rotación anterior, que mediante una palanca, lo convierte en longitudinal. Esto hace que las piernas de la figura se muevan con un movimiento de vaivén a derecha e izquierda. Al estar el autómata posado sobre una superficie – esto es, sin movimiento en los pies – el movimiento transmitido se percibe como un bamboleo de la figura.

juguete coleccionable
Transmisión del movimiento a la articulación de las piernas del autómata
Muñeco antiguo
Mecanismo del autómata

El mecanismo debe ajustarse  para que el movimiento de bamboleo se haga con la suficiente suavidad para que no afecte a la estabilidad del autómata. El ajuste se logra mediante la regulación de una de las piezas que une la articulación de las piernas.

Movimiento del autómata