Reloj de ojo de buey

En este artículo podemos ver un reloj de pared de los años 20 del siglo XX. Es un reloj de ojo de buey de la marca alemana de relojería Junghans. El marco está bellamente decorado con marquetería de nácar. La altura del reloj es de 50 cm. En la imagen de la izquierda vemos el reloj tras la reparación.

Mecanismo del reloj

Para sacar el mecanismo de la caja, se retira previamente el dial. Habitualmente, los mecanismos de los relojes de «ojo de buey»  van fijados a la pieza de madera del fondo del reloj. Las 3 piezas en forma de «L», atornilladas a la platina posterior del mecanismo, se sujetan a la caja a su vez mediante tirafondos. Este es el sistema de sujeción de los mecanismos a las cajas, tanto en los relojes de ojo de buey («horloges oeil-de-boeuf») como en los de cuadro («tableaux horloge»).

Esfera del reloj

La esfera o dial del reloj estaba rota. En este caso se trataba de una esfera de vidrio, con los números y los índices horarios pintados por la superficie interna. En estos relojes encontramos esferas de varios tipos: alabastro con números de porcelana, metal o vidrio. Sin duda las primeras, las esferas de alabastro con números de porcelana, son las más bonitas.

Se hace una esfera nueva, mediante un vidrio de 2 mm de espesor, cortándolo con forma circular al diámetro de la esfera original. Se hacen cuidadosamente los orificios para los bocallaves y los cañones horarios, en el lugar que corresponde. Es importante realizar esta operación de forma muy precisa para que los bocallaves queden en la posición correcta.

dial reloj
Imagen de la esfera rota del reloj

El vidrio circular de la esfera se monta sobre una base de metal. Ambos del mismo diámetro. Una pieza de papel interpuesta entre el vidrio y el metal favorece el que exista un mejor contacto; lo cual siempre es conveniente, dada la fragilidad del primero.

La esfera que forman el vidrio y su soporte metálico, se sujeta al mecanismo mediante tres vástagos pasantes que atraviesan la platina delantera. Los pasadores, a veces roscados, tienen la longitud suficiente para poder acceder a ellos desde la periferia del dial.

Desmontaje del mecanismo

Se desmonta el mecanismo completamente para limpiar las piezas y pulir las superficies en las que debe minimizarse el rozamiento. La fricción, el rozamiento entre algunas de las piezas de mecanismo, es un viejo conocido del relojero. Allí donde el rozamiento debe ser el mínimo posible, ha de hacerse todo lo necesario para disminuirlo. Además, al reducirlo, disminuirá también el ritmo de desgaste de la maquinaria del reloj. Limpiar, pulir y engrasar serán las armas en las que se aplicará el relojero para conseguir este propósito.

El mecanismo de este reloj es de buena calidad. Las platinas son «completamente masivas»; este es el término que utiliza el fabricante (» entièrement massif») para indicar que no hay en ellas espacios vacíos. Además están pulidas; práctica utilizada por los maestros relojeros desde antiguo para el embellecimiento de los mecanismos. El escape es de áncora con retroceso. Nuevamente observamos otro detalle que nos gusta en el mecanismo: el áncora. Hay muchas formas de hacer un escape con retroceso. Una simple lámina de acero doblada con la forma adecuada puede hacer la función de escape del áncora. En este mecanismo vemos un áncora con una forma y solidez propias de la mejor relojería. No se trata de un escape sin retroceso, es cierto, pero la ejecución es excelente. El resto de elementos del mecanismo, acordes con la buena calidad ya dicha: buena ejecución en el tallado de ruedas dentadas y piñones, pulido de piezas, utilización de acero de buena calidad… La dureza del acero empleado en un mecanismo favorece la resistencia del mismo al desgaste, y por tanto alarga la vida del reloj. La sonería es por chaperón o rueda contadera sobre gong.

Escape reloj
Detalle del escape
chaperon
Detalle de la rueda contadera

Se sacan los muelles reales de los cubos. Esta operación es fundamental, toda vez que su estado de limpieza y engrase es importante para que puedan ejercer la fuerza nominal según características.

muelle real reloj
Muelle real

Como en cualquier sonería sobre gong, el ajuste de la distancia entre este y el martillo es fundamental para que el sonido producido por la percusión del martillo sea el mejor posible. Un mal ajuste de esa distancia arruinará el sonido de mejor gong. Hay que decir también, que si el gong es mediocre, ese ajuste no podrá hacer milagros con el.

El martillo tiene una pieza de fieltro en la zona de impacto sobre el gong. Su función es evitar el sonido que se produciría si la percusión se diese entre dos piezas de metal. Cuando el martillo de la sonería de un reloj percute sobre un gong, se producen dos sonidos: 1) El de la vibración de gong 2) El de la percusión entre el gong y el martillo. Lo ideal es que tan solo se produzca el sonido de la vibración del gong. Un material que amortigüe el impacto del martillo -como por ejemplo el fieltro en este caso – evitará el sonido que produce el impacto entre los dos metales.

Hay otro sonido que no debe percibirse en la sonería de un reloj de calidad: el del propio mecanismo cuando entra en funcionamiento.

relojes de ojo de buey
Vista del reloj tras la reparación