Reparación de un reloj de cuadro (2ªparte)

Antes de desmontar el  mecanismo de un reloj hay que descargar de energía los muelles reales. Esta operación es muy importante. De no hacerlo, y acometer el desmontaje con los muelles cargados de energía, se producirán graves daños en las piezas del mecaninismo: doblado o rotura de pivotes, doblado y rotura de dientes, piñones, etc.

Se desmonta completamente el mecanismo. Esta operación, aunque no siempre es necesaria, si lo es en muchas ocasiones. La inserción de buchones, la comprobación del estado de los muelles reales, el pulido de los pivotes, etc., así lo exigen.

Platinas trasera y delantera del mecanismo. Se observan ralladuras, marcas y suciedad.

La limpieza de las piezas del mecanismo se hizo manualmente. Se utilizó gasóleo. Hay sistemas de lavado mediante ultrasonidos, también válidos. En este caso, se optó por la limpieza manual.

En esta fotografía vemos los muelles reales una vez sacados de los barriletes. Esta operación se hace para comprobar su estado, limpiarlos y engrasarlos.

Agujero de enganche de uno de los muelles reales en el que se observa una grieta. Se hace un orificio de enganche nuevo.

Dial del reloj en el que se observa que se ha borrado la escala divisoria de los minutos. Esto se produce porque se ha limpiado con agua o algún líquido que ha disuelto la tinta de dichas divisiones. La limpieza de este tipo de diales debe hacerse en seco y sin frotar apenas sobre la superficie del dial.

Se retira un resorte de la sonería, colocado en alguna reparación anterior, y se sustituye por otro antiguo similar al que tuvo inicialmente el mecanismo. Los resortes que actúan sobre el martillo de la sonería, en este tipo de maquinas, consistían en un alambre de acero con cierta dureza que se fijaba al extremo de un tornillo. El tornillo se enroscaba en la platina en un orificio pasante que permitía el emplazamiento del resorte entre las dos platinas. Es importante ajustar la fuerza que ejerce el resorte sobre el martillo.

También es conveniente asegurarse al montar el mecanismo, de que el resorte no ejerza fuerza sobre el brazo del martillo en el arranque de la sonería. Esto produciría un frenado en ese momento que debe evitarse. Es decir, la fuerza del resorte es conveniente que empiece a actuar sobre el brazo del martillo cuando el rodaje de la sonería ya está girando.

Durante la fase final, la operación del montaje es especialmente delicada. Es importante tener mucho cuidado de no ejercer fuerza sobre los pivotes, dado el pequeño diámetro de algunos y el riesgo de rotura.

Se montan todas las piezas del mecanismo. Todo debe disponerse de modo que no existan problemas de funcionamiento. Algunas piezas del rodaje de la sonería deben estar en una posición relativa entre ellas determinada.

Vista del reloj tras la reparación.