Una de las características que hace tan especiales a los relojes es el sonido de su escape. Su función es la de hacer que el avance de las ruedas dentadas del movimiento avancen de forma discontínua. La última rueda del movimiento, la llamada rueda de escape, interacciona con el áncora. A cada avance de esta rueda, uno de sus dientes entra en contacto con una de las paletas del áncora produciendo un sonido. Es lo que habitualmente llamamos sonido tic tac del reloj. La forma en la que se produce ese contacto: la frecuencia con la que interactúan la rueda de escape y el áncora, la intensidad del sonido, el grado de engrase de las superficies en contacto, etc., determina el sonido tic tac particular de un reloj.

Como percibimos la frecuencia

La frecuencia del tic tac del reloj es importante desde el punto de vista de las sensaciones que nos transmite. No produce la misma sensación el sonido del escape de un reloj regulado por un péndulo largo, como un Comtoise o un reloj inglés de caja alta, por ejemplo, que otro cuyo escape funciona a una frecuencia mucho mayor. Los relojes con péndulo largo tienen un sonido tic tac más pausado, que suele ser relajante para la mayoría de la gente. Por el contrario, los relojes de péndulo corto no producen la misma sensación de relajación.

Intensidad del sonido

La intensidad del sonido está directamente relacionada con la fuerza con la que impactan las paletas del áncora y los dientes de la rueda de escape. Además, la existencia o no de lubricante en dichas superficies amortigua o no, dicho impacto, produciéndose un sonido de mayor o menor intensidad.

Sonido metálico

El sonido tic tac de un reloj que lleva mucho tiempo sin revisar ni engrasar suele ser más “apagado”; es decir de menor intensidad y mas amortiguado. La razón de esto se debe a que la falta unas condiciones de engrase, digamos normales, hacen que la fuerza que llega al escape sea menor. Esa fuerza menor produce un impacto de menor potencia entre las paletas del áncora y los dientes de la rueda de escape. Además, la  existencia de suciedad (lubricantes, polvo,etc.) en las superficies de contacto actúa como un elemento amortiguador del impacto, reduciendo la intensidad del sonido, y por así decir “apagándolo”.

Cuando se limpia completamente el mecanismo de un reloj, y se retira la suciedad de las superficies de contacto del escape, el sonido tic tac del reloj se vuelve más metálico. Huelga decir que el escape del reloj debe estar limpio y engrasado para que realice mejor su función, y se reduzca su desgaste.

Anomalías del escape

El sonido del escape del reloj nos sirve también para saber si existe algún problema en el. Un sonido tic tac diferente para alguno de los dientes de la rueda de escape será un síntoma de que hay algún problema en el. Esta comprobación que puede hacerse sin más que escuchar el sonido que produce el reloj, es muy útil antes de abordar una reparación, o bien antes de realizar una hipotética compra. Pero, la comprobación ha de hacerse con la fuerza motriz que requiere ese determinado reloj. Una fuerza motriz excesivamente alta o demasiado baja, puede confundirnos a la hora evaluar el estado del escape.

En el siguiente video se puede ver y escuchar un escape que tiene un sonido arrítmico. Presenta un problema que debe corregirse.